Hay una cuestión que no nos gusta. Se trata de la mirada despectiva de algunos periodistas. Y dejaremos de lado aquí su procedencia, si son de la Ciudad de Buenos Aires o de Formosa. Se trata de cómo las cosas siempre se ven desde el lugar donde estamos parados.
Ayer, Marcelo Gantman, en su blog en el diario
La Nación hace un análisis de la situación que se planta a partir de la disputa entre las provincias de Buenos Aires y Córdoba por la sede de la Copa Davis.
Dice Gantman: "Las andanzas argentinas para elegir la sede generaron una confusión mayúscula que hizo creer que determinar el sitio del acontecimiento más importante que tiene la ITF, podía quedar en manos de cualquiera".
Decimos nosotros: cuando se refiere a cualquiera, ¿está hablando de la AAT? Porque si se sigue con la lectura, lo que aquí se entiende es que "cualquiera" es toda persona que no pertenezca a la elite del tenis. ¿Está mal que dos provincias quieran tener un evento así? ¿Deberían vestirse de blanco, ser amigos de Morea y los Mitre para entrar en la disputa?
Dice Gantman: "Desde que la Argentina eliminó a Rusia en semifinales, los intereses y los equívocos han guiado los pasos de muchos actores del tenis y la política nacional y provincial, que apartados de la letra del reglamento, se adueñaron de la final de la Copa Davis. Así, gobernadores, gerenciadores, tenistas, padres (no en el sentido religioso), managers, dirigentes locales, licenciatarios de estadios, abogados intendentes y empresarios, cometieron el peor de los errores: sentirse dueños de algo que no les pertenece".
Decimos nosotros: si la Davis no pertence a tenistas, a dirigentes, a licenciatarios, etc... ¿a quién le pertence? ¿A la impoluta ITF, esa que hace que los jugadores exploten en cada temporada bajo el régimen de un calendario de esclavos? ¿O será de los periodistas especialistas en tenis, a quienes no incluye en su lista, y dan cátedra por la televisión a la mañana, o en sus blogs?
Dice Gantman: "A propósito, ¿cómo vera la ITF que un banco quiera asociarse a la final en la Argentina siendo que justamente un banco es el patrocinante global de la competencia, con una inversión de 30 millones de dólares anuales?"
Decimos nosotros: haberlo sabido antes, Marcelo. No sabíamos que eras representante de la entidad BNP en Argentina. Menos mal que alguien les cuida el culito. ¿Tan groncho es usar la gorrita del Banco de Córdoba después de la semifinal de la Davis, che?
Dice Gantman: "Con precios (de las entradas) sugeridos que llegan a las nubes también hay un exceso de confianza en la idea de lograr que una ruta área comercial Madrid-Córdoba o bien Madrid-Mar del Plata pueda ser factible. "A lo sumo se puede contratar un charter que haga ese trayecto y que se pida con mucha autorización, pero no se consigue en el derecho de navegación aerea inaugurar una ruta comercial en menos de dos meses", dicen representantes de la industria turística local".
Decimos nosotros: para el rally mundial del año pasado se contraron no uno, sino cuatro charters desde Buenos Aires. Y en Argentina, todo se puede si hay voluntad, sobre todo si Ricardo Jaime, secretario de Transporte, se compromete (algo que no nos gusta, pero que sucedió).
Dice Gantman: "Finalmente la Davis en Buenos Aires quedó entreverada en la sensatez de no gastar dineros gestionados y arrimados por la función pública y la paradoja de que fuera el propio gobierno porteño el que cortara calles durante una semana y en Puerto Madero. "Igualmente una semana no alcanzaba para montar nada...", decían los especialistas en armar el "circo"de la Davis"
Decimos nosotros: seamos sinceros ¿Buenos Aires no tiene la sede por la sensatez del gobierno porteño o porque el Luna Park no tiene ni baños para recibir al "circo de la Davis? Mauricio, un amigo a la derecha...
Dice Gantman: "A Justine Albert le esperan días agitados en la Argentina. Conocerá el mar y las sierras. Y tendrá de primera mano un registro del manoseo inédito que hicieron los argentinos de una final de la Copa Davis. "Define la ITF...", dicen unos y otros. Así fue siempre. Así debe ser!"
Decimos nosotros: ¿a qué manoseo se refiere? Volvemos al comienzo: ¿Y la AAT? Fueron ellos los que abrieron sus teléfonos a los gobernantes y sus ofertas; fueron ellos los que desconocieron hasta último momento la voluntad de los jugadores (sí, Gantman, Nalbandian es el líder y es al que hay que escuchar... ¿O acaso no fue David quien le dio mística a un equipo de Copa Davis que se caía a pedazos?); fueron ellos los que dijeron que era Buenos Aires, que ahora Mar del Plata, que tal vez la Antártida Argentina.
Voluntad, trabajo, y hasta aporte económico por el deseo de tener un evento fantástico en una provincia es, para algunos periodistas, "manoseo". Pero, ¿saben qué significa para una ciudad del interior ser sede de un hecho mundial?
A veces, nos traicionan los prejuicios.
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